Revés para Donald Trump: el Gobierno no podrá deportar a migrantes de Estados Unidos a estos países
El fallo bloquea temporalmente una política que afecta a miles de migrantes de Estados Unidos.
Un reciente fallo judicial ha dado un giro inesperado a las políticas migratorias de Donald Trump. Un juez federal ha bloqueado temporalmente la capacidad del Gobierno de deportar a migrantes de Estados Unidos a países que no sean su nación de origen, a menos que se les brinde una oportunidad para presentar una solicitud de protección contra la persecución o la tortura.
Esta decisión, según un artículo de la CNN, tiene importantes implicaciones en la manera en que la administración Trump ha manejado las deportaciones.
Bloqueo judicial: Gobierno de Trump no podrá deportar a migrantes sin aviso previo
El fallo emitido por el juez del Tribunal de Distrito de EE. UU., Brian Murphy, es un golpe importante a los esfuerzos del Gobierno de Trump para aumentar las deportaciones a nivel internacional.
Según la decisión, el Gobierno no podrá enviar a migrantes fuera de Estados Unidos a destinos que no sean su país de origen sin antes ofrecerles un aviso por escrito del país al que podrían ser deportados.
Además, deberán proporcionar una oportunidad para que los migrantes busquen protección ante situaciones de persecución o tortura.
En su intento por agilizar las deportaciones, el Gobierno Trump ha dependido de acuerdos con varios países para aceptar a migrantes de naciones diferentes a la de su origen. Así, muchos migrantes han sido enviados a países latinos como Panamá, que acordaron recibirlos y repatriarlos.
Impacto de la medida: revés para Donald Trump en su política migratoria
El impacto de esta decisión judicial se siente con fuerza, ya que Donald Trump había buscado formas de acelerar las deportaciones, especialmente de aquellos migrantes que no tienen una visa o que se encuentran en situación irregular. Sin embargo, el Gobierno no podrá continuar con esta práctica sin seguir los procedimientos establecidos por el juez.
El revés para Donald Trump en este caso podría ser un freno para sus esfuerzos de endurecer la política migratoria en Estados Unidos.
La nueva medida también señala que las decisiones de deportación deberán ser más transparentes y respetar los derechos de los migrantes, algo que podría generar más desafíos legales para la administración.