Inflación de septiembre en Estados Unidos: cómo afecta a las tasas de la Fed
La inflación interanual de EEUU bajó al 2,4% en septiembre, según informó el Departamento de Trabajo.
La inflación en Estados Unidos continuó su tendencia a la baja en septiembre, marcando un nuevo mínimo en tres años.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC), indicador del Departamento de Trabajo, reveló que los precios al consumidor aumentaron un 2,4% en términos anuales, ligeramente por debajo del 2,5% registrado en agosto. Este dato, que representa el incremento de precios más bajo desde febrero de 2021, refuerza la percepción de que la inflación sigue debilitándose.
¿Cómo afecta la inflación a la Fed?
La inflación básica, que es más observada por la Reserva Federal (Fed), aumentó un 0,3% en septiembre, lo que elevó la tasa anual de esta medida al 3,3%, un aumento marginal desde el 3,2% de agosto. Esto demuestra que, aunque la inflación general se está moderando, los costos subyacentes aún presentan ciertos retos para la economía.
En cuanto a las tasas de interés, la Reserva Federal, tras reducir su tasa en medio punto porcentual en septiembre, ha dejado entrever que podría recortar las tasas en un cuarto de punto adicional en las dos reuniones restantes del año, siempre y cuando la inflación continúe con su tendencia a la baja. Si se cumplen estas expectativas, la tasa de interés actual, cercana al 4,8%, podría situarse alrededor del 4,3% para fin de año.
La moderación de la inflación y los movimientos de la Fed son seguidos de cerca por los mercados, ya que la reducción de tasas impacta directamente en la economía y en el comportamiento del mercado de valores. Por el momento, la Reserva Federal parece estar encaminada a una estrategia gradual, siempre vigilante de que la inflación se mantenga bajo control y cercana a su objetivo del 2%.