México reescribe su historia tras el descubrimiento arqueológico de 26 nuevas fosas mayas
La construcción del tramo 7 del Tren Maya deja al descubierto nuevos fósiles mayas que marcan un hito en la arqueología de México y la historia hasta ahora conocida de los Mayas.
Un reciente descubrimiento arqueológico derivado de la construcción del Tren Maya permitió descubrir áreas poco exploradas de la antigua cultura maya y que develan increíbles datos sobre la historia prehispánica que heredó México y que sigue reescribiendo su historia.
De acuerdo con los datos develados por el Intituno Nacional de Antropología e Historia, INAH, de México, el descubriento de las tumbas mayas se dio en un tramo de poco más de 36 kilómetros, entre los poblados actuales de Constitución y Lechugal, al sur de Campeche.
El INAH, en su informe oficial reportó la recuperaron 26 entierros humanos de época prehispánica, diez de ellos dentro de cistas.
Según el arqueólogo Gustavo Alejandro Cool Argüelles, estos hallazgos fueron significativos por la variedad de formas en las que los cuerpos fueron enterrados, incluyendo decúbito dorsal y lateral, extendido, flexionado y sedente.
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El hallazgo podría datarse del primer milenio d.C
El proyecto fue dirigido por un equipo de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia, bajo la coordinación inicial del arqueólogo Eric Saloma García y posteriormente del arqueólogo Alejandro Cañas Ortiz.
Durante la excavación, el arqueólogo Gustavo Alejandro Cool Argüelles y su colega Armida del Rosario Bolaños realizaron gran parte del trabajo en el frente 6 del Tramo 7.
Cool Argüelles detalló que, basándose en los tipos cerámicos recuperados, es probable que estos sitios fueron habitados entre los periodos Clásico Temprano y Tardío (250-900 d.C.).
Excavación y descubrimiento de monumentos mayas
Las labores de prospección y excavación se llevaron a cabo entre octubre de 2022 y febrero de 2023. Durante este tiempo, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del INAH, exploró 20 metros a cada costado del eje de la vía para liberar áreas propuestas por la Secretaría de la Defensa Nacional.
Este esfuerzo permitió identificar y excavar varios monumentos arqueológicos previamente registrados.
Hallazgos significativos de los restos fósiles humanos
A lo largo del trayecto de 36 kilómetros que separa los poblados de Constitución y Lechugal, se encontraron varias formas de entierros humanos.
En este frente no hubo un sitio rector, sino pequeñas concentraciones de plazas, terrazas y unidades habitacionales modestas, donde se hallaron muchos de los entierros.
Cool Argüelles mencionó que el 59% de los entierros se ubicaron en basamentos y el 35% en cimientos.
En ciertos monumentos se recuperaron tres o cuatro contextos funerarios. Un hallazgo notable fue el de cuatro entierros en una vivienda, dos de ellos en cistas, con objetos cerámicos cerca de los huesos del pie y las costillas.
Un descubrimiento sin precedentes
Otro descubrimiento llamativo fue un entierro a 1.5 metros de profundidad en el centro de una plaza, lo que sugiere la dedicación del individuo a este monumento.
Cerca de este espacio, en la localidad Justicia Social, se hallaron muros de dos cuartos con tres lápidas que probablemente formaban parte de una fachada.
México reescribe su historia tras este impotante descubrimiento
Estos hallazgos arqueológicos no solo enriquecieron el conocimiento sobre la cultura maya, sino que también demostraron la adaptación de estas comunidades a su entorno.
A diferencia de otros lugares asentados cerca de fuentes de agua, los habitantes de esta región vivieron en partes altas de cerros y contaban con aguadas y chultunes para la obtención de agua, lo que demuestra su ingenio y capacidad de adaptación a las condiciones ambientales adversas.
El descubrimiento arqueológico durante la construcción del Tren Maya fue fundamental para el descubrimiento y preservación de importantes vestigios de la cultura maya, proporcionando una ventana única al pasado prehispánico de México.