Tomar una copa de vino tinto cada noche para cuidar el corazón: ¿mito o realidad?
La evidencia en relación al consumo, los riesgos de tomar en exceso y las contraindicaciones alrededor de esta bebida milenaria.
¿Es bueno el vino para el corazón? Según la Sociedad Española de Cardiología, existen numerosos estudios que comprueban que el consumo moderado de esta bebida alcohólica, de 10 a 30 gramos de etanol al día, "reduce la mortalidad cardiovascular" y los "accidentes cerebrales isquémicos".
Esto se debe a su alto contenido en antioxidantes que aumentan los niveles de colesterol "bueno", HDL y provocan un efecto protector de las arterias. No obstante, el consumo excesivo, aclaran los expertos, puede tener efectos negativos en la salud.
Además, el vino es rico en flavonoides, taninos y polifenoles que tienen importantes beneficios para las arterias y retrasan el envejecimiento.
¿Cómo afecta el vino al corazón?
De acuerdo al estudio "El vino tinto y el resveratrol: ¿son buenos para el corazón?" de la Fundación Mayo, señala cantidades moderadas de todos los tipos de alcohol, no solo el vino, podrían tener beneficios para el corazón.
De este modo, una copa al día, tanto para mujeres como hombres mayores de 18 años, podría:
- Aumentar el colesterol de las lipoproteínas de alta densidad, es decir el colesterol HDL o "bueno".
- Reducir la formación de coágulos sanguíneos
- Prevenir el daño arterial causado por los altos niveles de colesterol "malo" o LDL.
- Incrementar la capacidad de las capas de las células que recubren los vasos sanguíneos.
Contraindicaciones a la hora de consumir vino
Desde la Fundación Española del Corazón, subrayan que el consumo de alcohol no está indicado en personas con:
- Diabetes
- Embarazadas
- Niños y adolescentes
- Personas con enfermedades hepáticas y cardiopatías graves o con algunas arritmias
- Personas bajo tratamientos médicos específicos.
Si bien beber alcohol puede tener efectos beneficiosos para la salud, los especialistas subrayan que esto dependerá de la cantidad, la edad de la persona, su estilo de vida, la cantidad de ejercicio físico que realice y la existencia de enfermedades preexistentes.