El SECRETO mejor guardado de los chefs: el truco sencillo con el ajo que cambiará tus platillos para siempre
Este truco lo implementan los mejores cocineros y es tan fácil que podrá mejorar rápidamente el sabor de las comidas.
Una de las maneras de aprender el arte de cocinar es a través de lo transmitido de generación en generación y todos los trucos que se comparten en esos lindos rituales.
También existen técnicas básicas que pueden transformar por completo el resultado final de un platillo que se han viralizado en redes sociales. En especial hay un truco sobre el ajo poco conocido por el público que ha sido clave en las cocinas profesionales.
El truco para sofreír ajo como un experto
Aunque la costumbre dicta que la cebolla va primero al sartén, lo cierto es que el truco de muchos chefs está en comenzar con el ajo. Este ingrediente tiene una reacción particular al calor: cuando se calienta lentamente, libera aceites esenciales que se integran con la grasa del sartén -ya sea aceite, mantequilla o margarina-, intensificando el sabor del platillo desde la base.
Al dorarlo apenas un poco a fuego bajo, el ajo desarrolla un sabor profundo sin llegar a quemarse. Esta técnica crea una capa de sabor que después se complementa con la dulzura natural de la cebolla, que se cocina con su propia humedad al agregarse más tarde. Así se logra un equilibrio perfecto, donde ninguno de los dos ingredientes opaca al otro.
Cómo aplicar este truco secreto en la cocina diaria
Este truco puede ser el aliado ideal en tu cocina, sobre todo para quienes buscan resaltar el sabor del ajo en recetas como arroz blanco, pasta al ajillo o frijoles refritos. En estas preparaciones, un ajo bien dorado aporta una nota intensa y deliciosa que eleva el platillo.
Por otro lado, comenzar con la cebolla sigue siendo una opción válida, sobre todo si se busca un sabor más suave y una base ligeramente dulce, como en guisos, salsas o platillos con carne. Todo depende del resultado que se quiera conseguir.
Lo importante es conocer cómo reacciona cada ingrediente al calor y usar ese conocimiento como un recurso para enriquecer la experiencia culinaria.