El oscuro significado que tienen estas frases sobre el comportamiento de los niños

Hay que tener mucho cuidado al hablar. Es importante saber cómo se dicen las cosas, pero también es necesario seleccionar las palabras adecuadas para no herir, mucho más si las frases o las palabras que se dicen van dirigidas a un niño o niña.

Si las personas tuvieran conciencia del poder que tienen las palabras y el efecto con el que ellas penetran en la psiquis de los demás, en particular en la mente de los más chicos, habría un mayor filtro en qué tipos de palabras y/o frases se utilizarían al dirigirse en sociedad.

Una sola palabra puede cambiar la forma en cómo un menor, sea tu hijo, sobrino, nieto o alumno puede pararse frente a la vida.

Procura nunca dirigirte a un menor con estas palabras o frases

El sitio web Chile Psicólogos publicó un análisis de 5 frases que jamás se le deberían decir a los niños.

1. !No llores!, no es para tanto
2. ¡Ya!, no pasó Nada
3. ¿Por qué no eres como el hijo de...?
4. Debes obedecer siempre a tus mayores
5. ¿Por qué no puedes hacer nada bien?

Estas frases, dichas con o sin intención, tienen un efecto hiriente y lesivo. Son frases tan una fuerte carga semántica que penetra en la psiquis de los niños y pueden llegar a cambiar la forma de ver el mundo, de comportarse en la vida y apartarlos de ser felices y vivir en armonía en la familia y la sociedad.

"Ellos (los menores) no tienen aún desarrollada su capacidad para discriminar lo que escuchan o leen. De ahí que debamos ser todavía más prolijos con todo lo que expresamos delante de ellos", remarcan los profesionales en psicología.

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Efectos lesivos en los niños de estas frases hirientes

Estos son algunos de los efectos negativos sobre las emociones y comportamientos de los niños que la psicología, según el artículo, sustenta.

"No llores, no es para tanto":

• Invalidez emocional.
• Aprendizaje de que sus emociones no son importantes.
• Dificultad para expresar y gestionar sus sentimientos.

"Ya, no pasó nada":

• Minimización del dolor y el cuidado personal.
• Riesgo de ignorar problemas de salud o emocionales en el futuro.
• Falta de comprensión de la importancia de cuidar su cuerpo y emociones.

"¿Por qué no eres como el hijo de...?":

• Autoestima frágil.
• Fomenta la envidia y el resentimiento.
• Enfoque en complacer a los demás en lugar de desarrollar la propia identidad.

"Debes obedecer siempre a tus mayores":

• Puede llevar a obediencia ciega y falta de autonomía.
• Dificultad para identificar y denunciar abusos o situaciones perjudiciales.
• Potencial abuso de poder por parte de figuras de autoridad.

"¿Por qué no puedes hacer nada bien?":

• Autoestima y autoconcepto negativos.
• Creencia de que no es capaz de realizar nada correctamente.
• Impacto en la confianza y el desarrollo de habilidades.

Evita usar estas frases negativas cuando le hables a un niño o niña. Recuerda el poder de las palabras y la influencia que podrían tener en la personalidad y comportamiento de ellos.