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La película donde el fin del mundo sucede en México: puedes verla gratis, está protagonizada por Christopher Lloyd y te dejará con ganas de más

Esta opción, dirigida por Ernie Barbarash, tiene una excelente premisa y locación, pero no alcanza su potencial.

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Con el fin de semana, la eterna pregunta de qué película elegir para disfrutar unas horas de evasión surge una vez más. En medio de la cantidad de estrenos disponibles en las plataformas de streaming, muchos optan por explorar el catálogo de opciones más antiguas.

Uno de esos títulos que podría parecer una excelente opción es un largometraje donde el fin del mundo comienza en México.

A primera vista, esta opción parece ser ideal para aquellos deseosos de una experiencia de cine apocalíptico. Sin embargo, es importante tener en cuenta que podría no cumplir con las expectativas esperadas en términos de narrativa y ejecución del género.

Si bien la premisa y la localización eran prometedoras, lamentablemente en esta ocasión no alcanza.

Si estás preguntándote qué película ver este fin de semana, aquí tienes una respuesta. Fuente: Prime Video.  

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La película donde el fin del mundo sucede en México

Estrenada en 2009 bajo la dirección de Ernie Barbarash, La amenaza de Casandra nos sumerge en una narrativa donde la ciencia ficción y el drama humano se entrelazan.

El largometraje, que también puede considerarse una miniserie dividida en dos partes, promete un thriller apocalíptico, pero en lugar de eso, oscila entre la comedia involuntaria y la exasperación contenida.

La trama gira en torno a un grupo de científicos liderado por el peculiar Daniel Lehmman, interpretado por un Christopher Lloyd que parece haber escapado de Volver al Futuro (1985)

Si bien el destino del mundo pende de un hilo, la solución no es una máquina del tiempo, sino un rescate que evita por completo el uso de un cronómetro. Esta falta de urgencia se trata con una seriedad casi nula, desafiando la lógica del peligro inminente.

Como si no fuera suficiente un evento catastrófico, en paralelo la trama sigue a un detective llamado Jack Crowe, interpretado por Billy Campbell, quien se embarca en una búsqueda personal para capturar a su ex-compañero Calvin Stark, un psicópata que amenaza con terminar la vida de su padre.

Además, la elección de Baja California como epicentro del avistamiento del asteroide 114 Casandra, que da nombre a la película, no es solo una curiosidad geográfica, sino una decisión que plantea más preguntas que respuestas. Es como si Barbarash hubiera elegido el lugar basándose en la premisa de "¿Por qué no?", en lugar de considerar la coherencia narrativa.

En el campo de los efectos especiales, la película no alcanza las alturas de un blockbuster de Hollywood, pero al menos evita los bostezos. La atmósfera realista creada es suficiente para mantener a los espectadores con los ojos abiertos.

En cuanto a los personajes, Michael Rooker, en el papel de Calvin Stark, se convierte en el personaje más encantador de la película, brindando momentos de reflexión en medio del desbarajuste general.

Por otro lado, la ayudante del científico, Imogene O'Neil, interpretada con un notable esfuerzo por Marla Sokoloff, añade una chispa de frescura. Aunque su actuación no alcanza como coprotagonista, aporta una vitalidad que hace que el público no se sumerja completamente en la monotonía.

Donde La amenaza de Casandra realmente tropieza es en su desesperado intento de abrazar el optimismo, que raya en la absurdidad. Las licencias cinematográficas son tan frecuentes que los guionistas podrían abrir su propia tienda de recuerdos de errores científicos.

Desde impactos sin cráteres hasta casualidades que desafían toda lógica, la película se convierte en un desfile de inexactitudes que parecen burlarse tanto de la ciencia como de los desastres naturales.

Asimismo, se ve atrapada en una glorificación del gobierno estadounidense que resulta más pesada que el asteroide que amenaza con destruir el planeta. En lugar de explorar el miedo y la desesperación de una manera profunda, se sumerge en sentimentalismos baratos y patriotismo desmedido.

En resumen, es una obra de entretenimiento ligero que provoca risas involuntarias y presenta un personaje entrañable en medio de un caos cinematográfico. Sin embargo, le falta un poco para alcanzar el éxito dentro del género apocalíptico.

El nacimiento del género apocalíptico

El género apocalíptico en el cine ha sido desde sus comienzos un terreno fructífero para la exploración de los temores más profundos de la humanidad y sus especulaciones sobre el futuro.

Basado en las visiones distópicas de autores como H.G. Wells, este género ha evolucionado significativamente a lo largo de las décadas, adaptándose a los cambios sociales, tecnológicos y políticos que moldean nuestra sociedad.

Desde su emergencia en la década de 1950, marcada por la Guerra Fría y el terror a la Guerra Nuclear, ha experimentado una notable metamorfosis. Películas como The Day the Earth Stood Still (1951) introdujeron temas de invasión extraterrestre y cataclismo global, estableciendo un precedente para exploraciones posteriores sobre la desintegración de la civilización y la supervivencia en entornos extremos.

Entre las obras más destacadas se encuentran filmes como Mad Max (1979) y su secuela Mad Max: Fury Road (2015), dirigidas por George Miller. Estas obras han definido un subgénero propio dentro del post-apocalipsis, explorando sociedades donde la violencia y la desesperación son la norma.

Blade Runner (1982), dirigida por Ridley Scott, aunque no estrictamente apocalíptica, presenta una visión distópica que cuestiona la esencia misma de la humanidad en un entorno tecnológicamente avanzado, pero moralmente decadente, también conocido como CyberPunk.

Las películas apocalípticas se distinguen por su exploración del colapso social y la desintegración de estructuras previamente establecidas. Estos escenarios desolados y ciudades en ruinas no solo sirven como telón de fondo visual, sino que también reflejan la pérdida emocional y espiritual que acompaña a la caída de la civilización.

La lucha por la supervivencia es un tema recurrente, con personajes enfrentando dilemas morales profundos mientras luchan por mantener su humanidad en medio del caos.

Estéticamente, el género utiliza una paleta visual que enfatiza la desolación y la decadencia, utilizando paisajes desérticos, colores apagados y una atmósfera opresiva. 

En conclusión, el cine apocalíptico no sólo entretiene, sino que también invita a una profunda reflexión sobre la fragilidad de nuestras estructuras sociales y morales, destacando cómo la humanidad enfrenta su propia posible extinción y las complejas implicaciones que esto conlleva para nuestro entendimiento del mundo y de nosotros mismos.

¿Dónde ver gratis "La amenaza de Casandra"?

La película puede ser vista gratis en plataformas como YouTube y Stremio. Asimismo, está disponible en Amazon Prime, donde se encuentra dividida en dos episodios independientes para la conveniencia de los espectadores.

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