Los tres rituales que no pueden faltar el 31 de diciembre si quieres dinero, amor y viajes en el 2025

Llegó el momento más esperado por millones de personas en el mundo. Es tiempo de Navidad, tiempo de celebrar en familia y de despedir el 2024.  Decirle adiós a un año es una bendición y hacerl cada año con rituales cargados de intenciones puede marcar la diferencia en lo que te espera en el 2025. 

Si estás buscando atraer dinero, amor y la oportunidad de viajar por el mundo durante el próximo año, ten en cuenta que hay rituales que te ayudarán a canalizar esa fuerza y energía para que tus metas y sueños del 2025 se hagan realidad más rápido.  

El ritual con uvas: la clave simple para la abundancia

Este clásico ritual no pasa de moda. Originario en España, para realizar este poderoso rito de 31 de dciembre, ten a mano 12 uvas, una por cada campanada que da inicio al nuevo año. Por cada uva que comas, formula un deseo. 

Si buscas dinero, enfócate en frases como "atraigo prosperidad económica". La tradición del ritual de las 12 uvas y los 12 deseos dice que este rito canaliza tus intenciones al universo, asegurando que tus metas se cumplan en los meses siguientes.

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El ritual de ropa amarilla: atrae amor y riqueza

El color amarillo simboliza la riqueza y la energía positiva de al vida. Usa ropa interior amarilla la noche del 31 de diciembre para llenar tu vida de oportunidades económicas. 

Si lo que estás buscando es amor, en cualquiera de sus formas, asegúrate de ponértela al revés antes de la medianoche y cambiarla de posición después del brindis. Este detalle, según las creencias ancestrales, invita al romance a tu vida.

El ritual de la valija que asegura viajes emocionantes y divertidos

Si sueñas con viajar en el 2025, este ritual es para ti. Toma una maleta, preferiblemente llena de objetos simbólicos como ropa o una guía de destinos que anhelas visitar. 

Si no tienes una valija o maleta, lleva tu mochila de viaje diario, y recorre con ganas tu cuadra justo cuando el relof marque las 00:00.

A la medianoche, sal a la calle y da una vuelta a la manzana con la valija en mano. Este ritual de 31 de diciembre, suelen decir, abre caminos para aventuras y viajes inesperados durante el nuevo año.