La evidencia de la materia oscura siempre estuvo frente a nosotros: hallan el objeto más codiciado de la física moderna
Este nuevo enfoque, que busca las huellas de la materia oscura en rocas antiguas, representa una vía prometedora para resolver uno de los mayores misterios del universo.
La materia oscura es uno de los grandes misterios del universo. Es un tipo de materia que no emite, absorbe o refleja luz, lo que la hace invisible a nuestros instrumentos de observación. Sin embargo, sabemos que existe debido a sus efectos gravitacionales sobre la materia visible.
Después de años de búsqueda infructuosa, un reciente descubrimiento podría cambiar por fin esta situación. Científicos de Virginia Tech propusieron que la materia oscura podría ser detectada a través de rocas antiguas.
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Los científicos están cada vez más cerca de encontrar pruebas de que existe la materia oscura
Después de recibir 3,5 millones de dólares de la Fundación Nacional de Ciencias, Patrick Huber del Virginia Tech comenzó a construir un nuevo laboratorio para probar que su hipótesis sobre la materia oscura es verdadera.
Su teoría propone que la Tierra, por ser un planeta tan antiguo, tuvo mucho tiempo para interactuar con la materia oscura. Durante ese periodo, es muy probable que esta interacción haya dejado algún tipo de huella en la estructura de las rocas.
De esta manera, se prometió buscar evidencia de que estas alteraciones existen y están presenten en la naturaleza, más cerca de lo que creíamos.
En búsqueda de huellas de la materia oscura en rocas antiguas
Los científicos liderados por Patrick Huber están buscando rastros diminutos de destrucción en las estructuras cristalinas de rocas antiguas, como posibles indicios de interacciones con la materia oscura en los primeros años de nuestro planeta.
Según explican, estas "huellas en miniatura" se producen cuando partículas de alta energía rebotan en el núcleo de los átomos dentro de la roca, desplazando esos núcleos de su posición original.
Esas brechas resultantes dejan cambios duraderos en el entramado cristalino, los cuales el equipo de científicos espera poder identificar.
"Tomaremos un cristal que ha estado expuesto a diferentes partículas durante millones de años y restaremos las distribuciones que corresponden a cosas que sí sabemos", comentó Vsevolod Ivanov, investigador del Instituto de Seguridad Nacional de Virginia Tech. "Lo que quede debe ser algo nuevo, y eso podría ser la materia oscura".
Para rastrear estas huellas de la materia oscura, los expertos están adaptando tecnologías de imágenes microscópicas que normalmente se usan para mapear el sistema nervioso de animales.
La idea es utilizarlas para detectar rastros de esas partículas de alta energía en las estructuras cristalinas de las rocas.
¿Por qué la materia oscura no se puede observar directamente?
En primer lugar, a diferencia de la materia que conocemos, la materia oscura no absorbe, refleja ni emite luz. Por esta razón, nuestros telescopios son incapaces de detectarla.
En segundo lugar, a diferencia de las estrellas, planetas o galaxias, no se condensa en objeto que si podemos observar directamente.
No obstante, los científicos pueden inferir que existen por una serie de pruebas que se recopilaron a través de los años:
- Rotación de las galaxias. Cuando observaron las galaxias, los científicos notaron algo extraño: las estrellas en los bordes exteriores de las galaxias giran mucho más rápido de lo que deberían. Para explicar esta velocidad, se necesita una gran cantidad de masa que no emita luz, es decir, materia oscura.
- Lentes gravitaciones. La gravedad de los objetos masivos puede desviar la luz de objetos más lejanos, un fenómeno conocido como lente gravitacional. Cuando los científicos observaron este fenómeno, detectaron una masa mucho mayor de la que puede emitir la materia visible.
- Formación de estructuras cósmicas. Las simulaciones por computadora demuestran que la materia oscura tiene un rol importante en la formación de grandes estructuras dentro del universo.