La sopa con más vitamina C y potasio: ayuda a proteger el corazón refuerza el sistema inmunológico
Rica en nutrientes, esta sopa se puede disfrutar en todo el año. Por qué es tan saludable y cómo ayuda a mejorar el organismo.
Si bien se la asocia con el invierno, la sopa es una comida nutritiva que se puede comer todo el año. Es por eso que los expertos en alimentación suelen recomendarla como parte de una dieta completa.
Dependiendo de los ingredientes, este alimento puede contar con una serie de beneficios para la salud, gracias al aporte de vitaminas, minerales y otros nutrientes de gran importancia.
Una de las sopas más deliciosas y saludables que se pueden preparar es la de calabaza con jengibre. Es muy sencilla de preparar y ofrece una amplia cantidad de nutrientes.
Qué nutrientes aporta la sopa de calabaza y jengibre
Vitaminas y antioxidantes
La calabaza es especialmente rica en vitamina A, pero también aporta vitaminas C y E, que son importantes para el sistema inmunológico, la salud de la piel y la vista. El jengibre añade más vitamina C y antioxidantes, que fortalecen el sistema inmunológico y ayudan a combatir enfermedades.
Fibra
La calabaza contiene una cantidad significativa de fibra, la cual es beneficiosa para la salud digestiva, ayudando a prevenir problemas como el estreñimiento.
Minerales
Esta sopa es una fuente de potasio, necesario para la salud cardiovascular, ya que ayuda a regular la presión arterial y es importante para el funcionamiento adecuado del corazón.
Compuestos antiinflamatorios
Tanto la calabaza como el jengibre contienen compuestos naturales con propiedades antiinflamatorias, que pueden reducir la inflamación en el cuerpo y aliviar el dolor.
Baja en calorías
Esta sopa es generalmente baja en calorías, especialmente si se prepara sin añadir ingredientes grasos como cremas o mantequillas. Esto la hace adecuada para incluir en dietas equilibradas y conscientes de la ingesta calórica.
Cómo preparar sopa de calabaza y jengibre
Ingredientes
- 1 calabaza pequeña
- 1 cebolla
- 5 gr. de jengibre fresco
- 1 diente de ajo
- 250 ml. de caldo de verduras
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
- Calentar un poco de aceite de oliva en una sartén mediana y sofreír la cebolla, hasta que esté tierna y transparente. Añadir el jengibre pelado y picado y el ajo. Sofreír a fuego lento durante uno o dos minutos.
- Añadir la calabaza junto con el caldo de verduras y llevar a ebullición.
- Cocinar a fuego lento durante unos 20 minutos, hasta que la calabaza esté blanda.
- Esperar a que las verduras se hayan enfriado y luego mezclar en una batidora de vaso o de mano hasta que quede una crema homogénea.
- Calentar la sopa en un recipiente adecuado y servir caliente en tazones.