Este pueblito de Cataluña no se dedica al turismo, pero la gente lo visita para comer en su increíble restaurante
Este restaurante familiar atrae al turismo por ofrecer platos caseros típicos de Cataluña elaborados con productos frescos de la región.
En la búsqueda de destinos auténticos, alejados de las rutas turísticas masificadas, a veces nos encontramos con joyas escondidas que ofrecen una experiencia única. Uno de esos lugares es Sant Agustí de Lluçanès, un pequeño pueblo en Cataluña que, aunque no se dedica al turismo, atrae a visitantes gracias a su restaurante Ca La Cinta, un lugar que se ha convertido en un referente gastronómico.
Ca La Cinta es un restaurante-hostal ubicado en Sant Agustí de Lluçanès, un pintoresco pueblo a tan solo 14 km de Sant Quirze de Besora, en la provincia de Barcelona. Este establecimiento familiar, con una tradición que se transmite de generación en generación, se especializa en cocina casera catalana elaborada con productos frescos y de mercado.
Es un lugar perfecto para los amantes de la buena comida que desean disfrutar de un ambiente tranquilo y auténtico, lejos de las multitudes turísticas.
Una oferta gastronómica excepcional en Sant Agustí de Lluçanès
El restaurante se distingue por su variada carta que incluye platos tradicionales que conquistan a todo aquel que los prueba. Entre sus especialidades destacan la oca con peras, los canelones caseros y el cabrito a la brasa, sin olvidar sus menús temáticos, como el menú de calçotada, que atrae a comensales locales y visitantes durante la temporada.
Además, Ca La Cinta ofrece opciones para personas con celiaquía, asegurando que todos puedan disfrutar de una comida deliciosa y adaptada a sus necesidades alimentarias.
Horarios y precios para visitar Ca La Cinta: la experiencia que no te puedes perder
El restaurante abre sus puertas de jueves a domingo de 8 a 16 horas, lo que permite a los visitantes disfrutar de una comida tranquila en el fin de semana. El precio medio de los menús oscila entre los 36 € y 50 €, lo que lo convierte en una opción asequible para quienes buscan una comida sabrosa y de calidad.
Aunque no cuentan con servicio a domicilio, ofrecen comida para llevar, lo que permite a los clientes disfrutar de sus platos en la comodidad de su hogar. Se recomienda hacer reservas con antelación, especialmente durante los fines de semana.
Sant Agustí de Lluçanès: un pueblo con historia
Más allá de su gastronomía, el pueblo de Sant Agustí de Lluçanès ofrece un entorno tranquilo y lleno de historia. Su principal calle, la calle Alou, data del siglo XVII y fue utilizada por los rebaños trashúmanos que hacían parada en el pueblo.
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A lo largo de la calle se pueden admirar ejemplos de la arquitectura rural del período barroco, que le dan un encanto único. La iglesia de Sant Genís del Pi, que antes del año 938 formaba parte de una jurisdicción autónoma, también se encuentra en esta calle y es un lugar de gran valor histórico para los residentes y visitantes del pueblo.
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