Este es el país de África con la mayor cantidad de pirámides en el mundo: supera a Egipto en cantidad y muy pocos lo conocen
Aunque la mayoría de la gente no lo sabe, este territorio cuenta con estas maravillas arquitectónicas que tienen una interesante historia.
Entre los tantos lugares asombrosos que hay en el planeta, las pirámides de Egipto aparecen entre los primeros sitios de cualquier ranking. Sin embargo, existe un país de África que ostenta el título de la nación con la mayor cantidad de pirámides en el mundo.
Aunque es un territorio no tan conocido por turistas de todo el mundo, algo que no sucede con Egipto, gracias a este particular dato son cada vez más las personas que muestran interés por visitarlo para conocer estas pirámides y la rica historia que encierran.
¿Cuál es el país de África que tiene más pirámides que Egipto?
Sudán es el país africano que cuenta con el mayor número de pirámides, con un total de 255, un número que casi duplica a Egipto. Estas estructuras están ubicadas en la región de Nubia, al norte del país, habitada por descendientes de los antiguos pobladores del Valle del Nilo.
La mayoría de estas pirámides se encuentran en Meroe, una antigua ciudad que floreció gracias a la industria del hierro, mientras que otras se hallan en El Kurru y Jebel Barkal.
La historia de las pirámides de Sudán se originó durante la 25ª dinastía de Egipto, cuando los faraones nubios se trasladaron hasta este país y establecieron el reino kushita.
Entre los años 1070 y 350 a.C., levantaron numerosas pirámides de arenisca y granito, con alturas que varían entre 6 y 30 metros, para enterrar a sus monarcas.
¿En qué estado se encuentran hoy en día las pirámides de Sudán?
Meroe fue declarado como Patrimonio Mundial por la UNESCO y puede ser explorado con la ayuda de guías turísticos. Sin embargo, el área enfrenta dificultades debido a las altas temperaturas y las frecuentes tormentas de arena, lo que ha acelerado la degradación de las pirámides.
Además, la falta de mantenimiento y la negligencia de algunos turistas han causado estragos considerables. De hecho, en 1880, el explorador italiano Giuseppe Ferlini destruyó varias pirámides buscando tesoros y muchas más han sido objeto de saqueos.
Para mitigar el impacto de las tormentas de arena, se ha lanzado un proyecto de reforestación por parte de gobiernos y organizaciones culturales.
Este plan ambicioso busca plantar vegetación adecuada al clima del Sahara en más de 100 millones de hectáreas, desde Senegal hasta Yibuti, aunque hasta ahora solo se ha alcanzado el 4 % del objetivo.