El bonito pueblo medieval a menos de 2 horas de Valencia donde sus habitantes comen en cuevas
Alcalá del Júcar es un destino con un sinfín de atractivos turísticos que combinan historia, naturaleza y cultura. Este pequeño pueblo medieval tiene varios puntos de interés que no puedes perderte si decides visitarlo.
Escapar de la rutina y descubrir destinos únicos es siempre una excelente idea para desconectar durante el fin de semana. Disfrutar de los paisajes, la gastronomía o la rica historia de España se convierte en una experiencia inmejorable al tomar un coche y pasar dos días de vacaciones.
Si estás buscando un rincón con historia, arquitectura encantadora, naturaleza impresionante y gastronomía peculiar, tienes que visitar Alcalá del Júcar, uno de los pueblos más bonitos de España. Situado sobre el meandro del río Júcar, este lugar ofrece una variedad de cosas para ver, explorar y disfrutar, a pesar de su tamaño.
¿Qué visitar en Alcalá del Júcar?
Con su imponente castillo, su ubicación privilegiada junto al río Júcar y sus famosas cuevas utilizadas como restaurantes, Alcalá del Júcar ofrece una experiencia única. Aquí, sus habitantes disfrutan de sus comidas en cuevas excavadas en la roca, lo que convierte a este pequeño pueblo medieval en un lugar con un encanto único y tradicional. Si estás planeando una excursión para sumergirte en su historia, su arquitectura y su gastronomía, sigue leyendo para descubrir todo lo que este mágico lugar tiene para ofrecerte.
Castillo de Alcalá del Júcar
Una de las principales atracciones de este pueblo es su emblemático castillo. Situado sobre una colina, el castillo domina el paisaje y ofrece vistas espectaculares del pueblo y del río Júcar. Aunque su origen es musulmán, ha sido restaurado en varias ocasiones. Se puede visitar el interior del castillo, donde encontrarás restos arqueológicos y espacios históricos. La subida puede ser empinada, pero la vista desde la cima vale completamente la pena.
La fortaleza incluye torres y murallas defensivas. Desde la terraza del castillo, se puede observar el entorno en su totalidad. La visita permite explorar el interior, que contiene restos arqueológicos y áreas con información histórica. La subida al castillo presenta un terreno empinado.
Cueva del diablo
La cueva del Diablo se localiza cerca del río Júcar y es conocida por sus formaciones rocosas. Este lugar ha servido históricamente como refugio y almacén.
La cueva presenta estructuras rocosas notables. La entrada es accesible y se recomienda llevar linterna y calzado adecuado para la exploración.
Además, se pueden visitar las Cuevas de Masagó y el Duende, que están adaptadas como bares y restaurantes, así como la Cueva Garadén. Aunque el autor ha visitado el lugar varias veces y solo ha explorado la Cueva del Diablo, existen más opciones para recorrer los túneles de la zona.
Puente romano
El Puente romano atraviesa el río Júcar y conecta distintas áreas del pueblo. Aunque no es tan antiguo como su nombre indica, el diseño del puente recuerda a las estructuras de la Roma antigua. La construcción es de piedra y presenta un diseño sólido. El entorno del puente es ideal para paseos y fotografía.
¿Cuál es la cueva para almorzar en Alcalá del Júcar?
Una de las experiencias más particulares de este pueblo es comer en cuevas.
¿Cuál es la cueva para almorzar en Alcalá del Júcar? Fuente: Archivo.
En las famosas Cuevas de Masagó, puedes disfrutar de una experiencia gastronómica única. Este restaurante, ubicado en cuevas excavadas en la roca, tiene un ambiente tradicional y acogedor. Entre sus especialidades, destaca el tradicional Gazpacho manchego, un plato típico de la región que merece ser probado.
Las Cuevas de Masagó tienen una excelente reputación y una puntuación de 4.5 sobre 5 en TripAdvisor. Por lo tanto, si estás planeando visitar Alcalá del Júcar, no puedes perderte esta experiencia única en un entorno natural histórico.
¿Como llegar Alcalá del Júcar desde Valencia?
Para llegar a Alcalá del Júcar desde Valencia en coche, toma la A-3 en dirección a Madrid. Sal en la salida 383 hacia la N-330, rumbo a Albacete. Continúa por la N-330 hasta Albacete.
Desde allí, toma la CM-320 en dirección a Alcalá del Júcar. Sigue la CM-320 hasta tu destino. El viaje dura aproximadamente 1 hora y 30 minutos, según el tráfico.