Repsol incrementa la retribución a los accionistas pese a haber ganado un 45% menos en 2024
Los resultados estuvieron influidos por un contexto geopolítico complejo, menores precios del crudo, del gas y de la electricidad, márgenes moderados en el refino y bajos en la química.
Repsol obtuvo un resultado neto de 1756 millones de euros en 2024, un 45% menos que el año anterior. En tanto, el resultado ajustado se situó en 3327 millones de euros, un 34% menor al de 2023. Con todo, la petrolera se comprometió a aumentar un 30% el dividendo a los inversores en relación al ejercicio anterior, hasta los 0,90 euros por papel y recomprar acciones por valor de al menos 700 millones de euros este año. En definitiva, la empresa repartirá unos 1928 millones entre su medio millón de accionistas.
El mercado celebra la decisión de la multinacional que lidera Josu Jon Imaz con una subida de la acción a primera hora de la tarde de un 6,47%, comerciando sus títulos a 12,96 euros.
Repsol explica que los resultados estuvieron influidos por un contexto geopolítico complejo, menores precios del crudo, del gas y de la electricidad, márgenes moderados en el refino. "En este escenario, el desempeño de la compañía permitió mejorar la retribución a la química. En este escenario, el desempeño de la compañía permitió mejorar la retribución a los accionistas y mantener un esfuerzo inversor alineado con la visión estratégica", afirma en el documento enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
(Fuente: Shutterstock)
El resultado neto de la compañía estuvo fuertemente influido por el impacto negativo por del Gravamen Temporal Energético en España, por el que la empresa tuvo que desembolsar 450 millones de euros.
La aportación a las arcas públicas que Repsol realizó durante el ejercicio continuó siendo muy destacada, con una contribución fiscal en España de 8427 millones de euros, que supone un 68% del total de los pagos fiscales del Grupo, esto es 12.382 millones.
Así y todo, Repsol generó la suficiente caja para mejorar la retribución de sus accionistas y mantener un esfuerzo inversor alineado con la actualización estratégica 2024-2027, con unas inversiones netas de 5.700 millones de euros durante el ejercicio.
Además, en el último trimestre redujo en 524 millones su deuda respecto al cierre de septiembre. Por su parte, la liquidez se situó al final del año en 9453 millones de euros, lo que supone 3,51 veces los vencimientos de deuda bruta a corto plazo.
Cómo será la retribución a los accionistas de Repsol
La empresa destaca que el pago a los accionistas es una de las prioridades de la estrategia de Repsol, que empleará hasta 10.000 millones de euros para este fin en el periodo del Plan Estratégico, con una previsión de distribuir a los accionistas entre el 25% y el 35% del flujo de caja operativo del periodo.
Al aumento del pago a sus casi 500.000 accionistas ya destacado, Repsol afirma además que proyecta para 2025 una remuneración total a los accionistas de entre el 30 y el 35% del flujo de caja de las operaciones. Para ello, distribuirá en efectivo 0,975 euros brutos por acción, lo que supone un incremento del 8,3% respecto a la remuneración de 2024. Esta cantidad incluye 0,475 euros brutos por acción ya pagados el 14 de enero de 2025. Además, ejecutará durante el ejercicio una recompra de acciones mínima de 700 millones de euros para reducir capital, también como ya se comentó.
Así las cosas, la petrolera dice que, para cumplir con esta última meta, el Consejo de Administración de Repsol decidió proponer a la siguiente Junta General de Accionistas una reducción de capital de acciones a ser adquiridas por una cantidad equivalente a 350 millones de euros, de los cuales 300 millones se obtendrán a través de un programa de recompra de acciones y 50 millones a través de la liquidación de derivados existentes, que se espera sea ejecutada antes de finales de julio.
"El año pasado avanzamos con firmeza en las líneas estratégicas que definimos para el periodo 2024-2027, impulsados por un sólido comportamiento de nuestros negocios, que nos permitió incrementar nuestro dividendo y nuestras inversiones. En 2025 seguiremos esta misma senda, cumpliendo una vez más con nuestros compromisos de retribución a los accionistas, manteniendo nuestra fortaleza financiera y nuestras inversiones para seguir creciendo de forma rentable. Continuaremos reforzando nuestra apuesta por la transición energética y garantizando el futuro de la industria, uno de los pilares para el desarrollo económico y social del país", afirma Josu Jon Imaz, Consejero Delegado de Repsol.
Proyectos clave en upstream
En esta área de negocios, cuyo eje es la Exploración y Producción, su cartera de proyectos se focalizó en aquellos con mayor potencial de creación de valor y que garantizan la competitividad de este segmento. Así, la producción media ascendió a 571.000 barriles equivalentes de petróleo al día, por encima de los 550.000 barriles establecidos como objetivo para el periodo de vigencia del Plan Estratégico.
Asimismo, Repsol avanzó en la gestión activa de su cartera, con la venta de activos en Colombia, Eagle Ford South West (Estados Unidos), Ecuador, Indonesia y campos maduros en Trinidad y Tobago. Mientras, completó la integración en su cartera del 49% de la participación en RRUK (Reino Unido) y conectó nuevos pozos en Marcellus (Estados Unidos), entre otros activos.
La compañía continuó dando pasos para el desarrollo de diversos activos estratégicos, como la primera fase del desarrollo de Pikka, en Alaska, y el proyecto Salamanca (Leon y Castile), en aguas estadounidenses. En ambos casos el inicio de la producción se espera para 2025. También progresó en el campo Raia, en el bloque BM-C-33 de Brasil, que se prevé que pueda cubrir hasta el 15% de la demanda de gas de este país.
Otro hito destacado fue el descubrimiento realizado en julio en aguas mexicanas (Yopaat-1), en el bloque 9, con una estimación preliminar de recursos totales de 300-400 millones de barriles equivalentes de petróleo y gas. Asimismo, gracias a dos operaciones realizadas en septiembre y diciembre, Repsol incrementó hasta un 65% su participación en el adyacente bloque 29, donde se encuentran los descubrimientos Polok y Chinwol, que ya inició la fase de preparación para su desarrollo.
En lo que respecta a los precios de referencia internacionales de las materias primas, el 15% de bajada de la cotización media del Henry Hub, hasta 2,3 dólares por MBtu, fue el elemento que más influyó en el desempeño del área. Por otro lado, subraya la compañía, el crudo Brent disminuyó su precio medio un 2,2%, cerrando el año con una media de 80,8 dólares por barril.
En camino a una transición energética
En febrero de 2024, Repsol presentó su Actualización Estratégica 2024-2027, que profundiza en una transición energética rentable, da impulso a la apuesta multienergética de la compañía y mantiene como pilares la solidez financiera, la remuneración a los accionistas y el cumplimiento de sus objetivos de descarbonización.
Uno de los ejes de esta transformación es la evolución de los siete complejos industriales de la compañía, que emplean a más de 6.500 personas de manera directa, para mejorar su competitividad, garantizar su futuro y reducir la huella de carbono. En 2024, Repsol realizó inversiones netas de más de 1.200 millones de euros para mantener a la vanguardia estas instalaciones y desarrollar productos de bajas emisiones, como los combustibles renovables, el hidrógeno renovable y el biometano.
Por otra parte, a finales de enero de 2025, la compañía aprobó una inversión histórica, de 800 millones de euros, para construir la primera planta europea que transformará residuos urbanos en metanol renovable -un combustible que descarbonizará el transporte-, y productos circulares. La instalación se situará en el centro industrial de Repsol en Tarragona.
La compañía prevé invertir los primeros 100 millones de este proyecto en 2025, año en el que también estima que aprobará los electrolizadores de Cartagena (100 MW), Petronor (100 MW) y Tarragona (150 MW).
Por último, Repsol aumentó el año pasado el número de clientes de electricidad y gas en España y Portugal, alcanzando una cifra de 2,5 millones a finales de diciembre, un 15% más que al cierre de 2023 (330.000 clientes adicionales).
De hecho, la compañía, cuarto operador del mercado eléctrico en España, vivió el pasado año el mayor crecimiento de una comercializadora no incumbente desde que en 2009 se llevó a cabo la completa liberalización del sector en el país. Además, sumó cerca de 1,4 millones de clientes digitales adicionales en 2024, hasta alcanzar un total de 9,3 millones a finales de diciembre, en su mayoría a través de la app Waylet.