Murió la ley de alquileres | El precio de un departamento subió por encima de la inflación en 2024
Un informe del portal Fotocasa revela que el mercado de alquiler vive su mayor crisis en la última década.
En los últimos años, el acceso a una vivienda digna ha sido uno de los principales retos para millones de españoles. La combinación de una demanda creciente y una oferta limitada ha tensado el mercado, haciendo que los precios del alquiler aumenten a niveles históricos, especialmente en las grandes ciudades.
Durante 2024, esta problemática alcanzó su punto más crítico. Según el Índice Inmobiliario Fotocasa, el precio medio del alquiler cerró el año con un incremento anual del 14%, la segunda subida más alta registrada desde 2018. Este fenómeno no solo afecta el bolsillo de los inquilinos, sino que también pone en evidencia la necesidad de soluciones estructurales para alcanzar un equilibrio.
Incrementos en toda España: cifras récord
De acuerdo con los datos del informe, el precio medio del alquiler en diciembre de 2024 se situó en 13,29 euros/m² al mes, un 14% más que en el mismo mes del año anterior. En comunidades como Madrid y Murcia, los aumentos superaron el 18% y el 16%, respectivamente.
Este número es superior al de la inflación interanual. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), esta se situó en 2,8%, cifra que el Gobierno consideró controlada al estar ocho décimas por debajo del promedio de 2023.
Estas cifras colocan a estas regiones entre las más afectadas por la escalada de precios, junto con Cataluña y La Rioja, donde también se registraron subidas significativas.
En términos absolutos, ocho ciudades del país superaron los 20 euros/m² al mes, siendo Madrid la más cara con 20,62 euros/m². Este encarecimiento ha impactado no solo a los grandes núcleos urbanos, sino también a provincias como Palencia y Sevilla, donde los incrementos fueron de 19,5% y 15,5%, respectivamente.
Por qué suben los alquileres
La situación actual responde a varios factores. Por un lado, la oferta de vivienda en alquiler ha disminuido drásticamente en los últimos años, en gran parte debido a la reducción de viviendas sociales y el impacto de las normativas restrictivas para los propietarios.
Desde 2014, España ha reducido su parque de vivienda pública, intensificando el desequilibrio entre oferta y demanda. Por otro lado, la pandemia de COVID-19 y la posterior recuperación económica han contribuido al aumento de la demanda de alquiler, especialmente en las zonas urbanas.
Además, los cambios legislativos, como el tope del 3% en la actualización de las rentas introducido en 2023, han generado incertidumbre entre los propietarios, lo que ha reducido aún más la disponibilidad de viviendas en el mercado.
Soluciones y perspectivas futuras
Ante este panorama, los expertos coinciden en la necesidad de adoptar medidas urgentes y efectivas. La construcción de vivienda social, la movilización de viviendas vacías y la implementación de incentivos fiscales para los propietarios son algunas de las soluciones propuestas.
Según el informe, en regiones como Madrid y Cataluña, el desarrollo de políticas específicas podría aliviar significativamente la presión sobre los precios.
Cualquier solución requerirá de un enfoque coordinado entre el gobierno central, las comunidades autónomas y el sector privado. Con la entrada de 2025, la urgencia por garantizar el acceso a una vivienda digna se mantiene como una prioridad en la agenda política y social del país.