La agenda de sostenibilidad del Banco Europeo de Inversiones: inversiones clave en la era post-combustibles fósiles
Con Nadia Calviño al frente, el Banco Europeo de Inversiones redirige su enfoque financiero hacia proyectos que promuevan la sostenibilidad ambiental, incluyendo la expansión en energías renovables y la eliminación de inversiones en combustibles fósiles.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) es la institución de préstamo a largo plazo de la Unión Europea, propiedad de sus Estados miembros. Tiene la misión de contribuir al progreso económico y social de la región mediante la financiación de proyectos viables que fomenten la integración, el desarrollo equilibrado y la cohesión económica y social de los Estados miembros.
Además de apoyar proyectos dentro de la UE, el BEI también financia operaciones fuera de ella, promoviendo los objetivos de política exterior y desarrollo de la Unión.
Las principales inversiones del BEI
El BEI se centra en cuatro áreas principales de inversión: innovación y habilidades, acceso a financiamiento para pequeñas y medianas empresas, infraestructura y medio ambiente.
Como parte de su compromiso con el medio ambiente, el BEI se ha posicionado como el "Banco Climático de la UE", con el objetivo de movilizar la financiación hacia acciones que contribuyan a la lucha contra el cambio climático, la protección del medio ambiente y la promoción de la sostenibilidad.
En su papel, el BEI busca no solo el impacto económico de sus inversiones, sino también el beneficio social y ambiental, contribuyendo así al desarrollo sostenible y al cumplimiento de los objetivos climáticos y de sostenibilidad de la Unión Europea y del mundo.
Hoy en día, y desde enero de este año, la economista española Nadia Calviño se desempeña como presidenta de la entidad. Antes de asumir este importante rol, Calviño sirvió como la Primera Vicepresidenta del Gobierno de España y Ministra de Economía desde julio de 2021 hasta diciembre de 2023, bajo la administración del presidente Pedro Sánchez.
Para conversar sobre las inversiones actuales del banco y los motivos y objetivos detrás de ellas es que El Cronista España conversó con Alexandre Staff Varela, quien actúa como el principal punto de contacto del BEI en América latina.
Foco en el cambio climático, la sostenibilidad y las empresas pequeñas
Varela explica que el BEI financia proyectos siguiendo las prioridades políticas de la Unión Europea, con un enfoque importante en el cambio climático y la sostenibilidad. Se ha comprometido a alinear todas sus operaciones con los objetivos del Acuerdo de París y ha dejado de financiar proyectos que incluyan combustibles fósiles.
"Invertimos mucho en energías renovables, eficiencia energética, transporte limpio, agua y saneamiento y protección del medio ambiente", apunta Varela.
"El ex presidente (Werner) Hoyer decidió en 2018 diseñar la hoja de ruta climática para el BEI, así que entonces nos convertimos en el Banco Climático de la UE y este ha sido un objetivo que no ha dejado de crecer. En la actualidad, el BEI ya dirige el 60% de su financiamiento a proyectos de acción por el clima y sostenibilidad medioambiental, que el año pasado ascendió a 44.300 millones de euros. Esa es la nueva tendencia, creo, es algo que la presidenta Calvino, ha confirmado como la primera prioridad del BEI", dice.
Respecto a proyectos puntuales, Varela se refiere a la necesidad de crear un mercado de hidrógeno verde, y más aún desde la agresión de Rusia a Ucrania. "América latina está jugando un papel importante. Hay otros países en otras regiones, como Marruecos y Australia, que también están siguiendo de cerca esta oportunidad", comenta.
Además, está priorizando la inversión en la economía digital y apoyando la adaptación al cambio climático. El BEI ve su papel futuro como crucial en abordar desafíos globales como el cambio climático, la digitalización y la salud global, colaborando estrechamente con los países socios y promoviendo la sostenibilidad en todas sus operaciones.
El representante del BEI recuerda que la entidad, durante la crisis del euro, reforzó su trabajo con las pequeñas y medianas empresas. "Fue crucial para reactivar la economía regional", cierra.