Este CEO promovió a sus empleados "hacia afuera" y generó polémica adentro y afuera de la empresa
Este líder redefine el despido con una expresión que genera debate.
En una reciente conferencia con inversores, Bernard Arnault, director ejecutivo de LVMH, sorprendió al referirse a los empleados despedidos como "promovidos hacia afuera". Esta peculiar expresión ha generado controversia y debate en el mundo empresarial y entre el público en general.
Arnault utilizó este término al abordar la reestructuración de Tiffany & Co., la icónica joyería que LVMH adquirió en 2021. Describió a Tiffany como una "bella durmiente" que necesitaba ser revitalizada, lo que implicaba la salida de empleados que no podían adaptarse a los nuevos estándares de la empresa.
Según Arnault, estos trabajadores fueron "promovidos hacia afuera", sugiriendo que encontrarían mejores oportunidades en otras compañías.
Inspiración en otras empresas tecnológicas
Esta terminología no es exclusiva de LVMH. Empresas tecnológicas como Meta, dirigida por Mark Zuckerberg, han adoptado enfoques similares. Meta recientemente despidió al 5% de su personal, centrándose en empleados de bajo rendimiento.
Zuckerberg mencionó la intención de "elevar el nivel de gestión del rendimiento y mover a los de bajo rendimiento más rápido". Internamente, Meta se refirió a estos despidos como "desgaste no lamentable", una forma de suavizar el impacto de las salidas.
Otras empresas, como Amazon, también emplean términos como "desgaste no lamentado" para describir despidos, buscando mantener la moral del equipo y minimizar la percepción negativa asociada con las reducciones de personal.
Reacciones y críticas a la nueva terminología
La expresión "promovidos hacia afuera" ha generado diversas reacciones. Algunos la ven como una forma creativa de abordar una situación difícil, mientras que otros la critican por intentar maquillar la realidad de los despidos. Expertos en recursos humanos señalan que, aunque el lenguaje puede influir en la percepción, es esencial abordar las salidas de manera transparente y respetuosa.
Además, esta práctica pone de relieve las diferencias culturales en la gestión empresarial. Mientras que en algunas culturas se valora la franqueza, en otras se prefiere un enfoque más diplomático. La elección de palabras como "promovidos hacia afuera" refleja una tendencia hacia la suavización del lenguaje corporativo, pero también plantea preguntas sobre la autenticidad y la responsabilidad de las empresas hacia sus empleados.
Implicaciones para el futuro laboral
La adopción de términos como "promovidos hacia afuera" podría influir en cómo otras empresas manejan y comunican las salidas de personal. Si bien puede ser una estrategia para reducir el estigma asociado con los despidos, es crucial que las organizaciones consideren el impacto en la confianza y la moral de los empleados restantes.
En última instancia, más allá de la terminología utilizada, lo fundamental es cómo se gestionan estas transiciones. Proporcionar apoyo, como asesoramiento profesional y paquetes de indemnización justos, es esencial para garantizar que los empleados salientes se sientan valorados y puedan avanzar con éxito en sus carreras.
La expresión de Arnault ha puesto de relieve la importancia del lenguaje en el entorno corporativo y ha abierto un debate sobre las mejores prácticas en la gestión de recursos humanos. A medida que el mundo laboral evoluciona, las empresas deberán equilibrar la necesidad de eficiencia con la responsabilidad social y el bienestar de sus empleados.