Las enseñanzas que dejó un gran filósofo argentino: la ética basada en el bienestar humano
Un legado de pensamiento crítico y ético llega desde el Río de la Plata.
Mario Bunge, uno de los filósofos y científicos más destacados de América latina, ha dejado un vasto legado que sigue influenciando diversas áreas del conocimiento, incluida la ética.
Con una obra que abarca más de cincuenta libros y numerosos artículos, Bunge es reconocido por su enfoque pragmático y su compromiso con la realidad, enfocando sus esfuerzos en mejorar la vida humana a través de la aplicación de la ciencia y la razón.
Ética y ciencia: dos caras de la misma moneda
Para Bunge, la ética y la ciencia no son disciplinas separadas, sino interconectadas. Consideraba esencial que los desarrollos científicos y técnicos estuvieran siempre alineados con valores éticos que promuevan el bienestar humano.
Esta visión se refleja en su libro "Ética, ciencia y técnica", donde explora cómo estas áreas pueden influenciarse mutuamente para un beneficio común.
Impacto y aplicaciones prácticas
Aplicaciones en la vida diaria
La ética de Bunge, basada en el bienestar humano, sugiere que todas las acciones y políticas deberían evaluarse según su impacto en la mejora de la vida de las personas. Este enfoque no solo es aplicable en el campo científico o técnico, sino en la toma de decisiones cotidianas y en la formulación de políticas públicas.
Educación y crítica a la pseudociencia
Un aspecto notable de su carrera fue su crítica a la pseudociencia y a corrientes filosóficas que consideraba ilógicas o sin base empírica. Bunge se mantuvo firme en su creencia de que la educación en la ciencia y el pensamiento crítico son fundamentales para el desarrollo de sociedades más informadas y menos susceptibles a falacias y errores de razonamiento.
Legado y relevancia contemporánea
La insistencia de Bunge en la necesidad de un marco ético que acompañe al desarrollo científico y técnico es particularmente relevante en la era actual, donde la tecnología avanza a un ritmo sin precedentes. Su obra ofrece una brújula ética necesaria para navegar los desafíos modernos, desde la biotecnología hasta la inteligencia artificial.
Mario Bunge, que falleció en 2020 en Montreal (Canadá), no solo enseñó cómo la ciencia y la ética podrían coexistir armoniosamente, sino que también demostró que el pensamiento crítico y una firme base ética son esenciales para cualquier sociedad que aspire al progreso verdadero y al bienestar de sus ciudadanos. Su pensamiento continúa vivo, inspirando a nuevas generaciones a pensar de manera crítica y actuar éticamente en todas las esferas de la vida.