¿La Iglesia Católica está en peligro? El Arzobispado demandó a las monjas que acusaron de hereje al Papa Francisco
En la misiva, repasan los acontecimientos que se han producido desde que las monjas excomulgadas publicaran su "Manifiesto católico" y anunciasen su intención de no obedecer al Papa.
El lunes el arzobispado de Burgos ha interpuesto una demanda de desahucio contra las exmonjas del convento de Belorado, que protagonizaron un verdadero escándalo. Hace cuatro meses, las clarisas tomaron la decisión de separarse de la Iglesia católica luego de fuertes declaraciones contra el papa Francisco.
En un comunicado difundido por el arzobispado, han afirmado que el objetivo es que las exreligiosas "abandonen el monasterio".
En la misiva, repasan los acontecimientos que se han producido desde que las monjas excomulgadas publicaran su "Manifiesto católico" y anunciasen su intención de no obedecer al Papa ni acatar las decisiones del arzobispado de Burgos.
El polémico caso de exmojas: qué ocurrió en Burgos
El pasado 22 de junio se declaró la excomunión y expulsión de la vida consagrada de las diez hermanas acusadas de cisma.
Tres meses después, continúan en el Monasterio de Santa Clara de Belorado junto con las cinco religiosas no excomulgadas y niegan que sean okupas, ya que, según aseguran, la propiedad de los inmuebles (también los de Derio y Orduña) es de la "sociedad civil" creada para sustituir a las religiosas.
Sin embargo, el Arzobispado de Burgos mantiene que la propiedad recae en la comunidad religiosa y ahora ha llegado la demanda.
La demanda del Arzobispado de Burgos
A partir de ese momento, las exmonjas "carecen de título legal para habitar los inmuebles pertenecientes a los monasterios que ocupaban", subraya la archidiócesis al recordar lo sucedido.
Ha destacado que ha sido "prudente" al darles un tiempo de espera. "Comprobado que no ha habido ningún intento de reconsideración por parte de las exreligiosas, los servicios jurídicos han procedido a interponer la demanda correspondiente ante el Juzgado de Briviesca", explica la autoridad.
Ha precisado también que en este tiempo de espera se ha conocido la denegación de la inscripción en el registro del Ministerio del Interior de las asociaciones que las exreligiosas habían creado y "con las que pretendían transformar las entidades jurídicas canónicas de los monasterios en asociaciones civiles, algo que es jurídicamente inviable".
En ese sentido, la Comisión Gestora del arzobispado ha expresado "preocupación por el estado de salud y el cuidado de las cinco hermanas mayores que conforman la comunidad monástica".
Además, aclaró que está preparada para atender "cuanto antes" todas las necesidades que precisen. Todo con la colaboración de la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu y de sus familiares. No obstante, la diócesis ha vuelto a manifestar su disposición para "ayudar en el camino de retorno a la comunión eclesial" a las exmonjas. "Serían acogidas con delicadeza y misericordia, a imagen de la parábola del hijo pródigo".