El templo romano que fue "redescubierto" en 1882 y se encuentra en este pueblito de Barcelona: descubre esta joya arquitectónica
Una joya arquitectónica del siglo II que sobrevivió al paso del tiempo y se encuentra en el corazón de Cataluña.
España está llena de rincones fascinantes que nos conectan con su rica historia. Uno de estos tesoros se encuentra en la encantadora localidad de Vic, en Barcelona.
En el corazón de Cataluña, se alza un templo romano que es mucho más que una simple construcción antigua: es un testimonio único del pasado que sigue cautivando a quienes lo visitan.
El redescubrimiento del Templo Romano de Vic: una historia de asombro y conservación
En 1882, la historia de Vic cambió para siempre cuando un grupo de obreros demolió el castillo medieval que ocultaba una maravilla durante siglos. Lo que hallaron fue sorprendente: un templo romano casi intacto, con elementos arquitectónicos que evocaban la grandeza de la época imperial.
Este edificio, construido en el siglo II, había sobrevivido gracias a su integración en otras construcciones, protegiéndolo del desgaste del tiempo y los conflictos.
Dedicado probablemente al culto imperial o a la tríada capitolina, el templo conserva su podio, la cela central y parte de su atrio, donde destacan las ocho columnas reconstruidas que enmarcan la majestuosidad de su diseño.
El proceso de restauración, iniciado tras su redescubrimiento, se extendió hasta 1959, cuando finalmente recuperó su esplendor original. Hoy en día, el Templo Romano de Vic es mucho más que un simple monumento: es una auténtica ventana abierta al pasado, con acceso gratuito para quienes quieran explorar su historia.
Más allá del templo romano: ¿qué más se puede hacer en Vic?
Además de disfrutar del templo romano, Vic ofrece una gran variedad de actividades y atractivos que enriquecen la experiencia:
Explorar la Plaza Mayor: este espacio vibrante y lleno de historia es ideal para pasear y admirar los edificios porticados, especialmente durante Semana Santa, cuando la plaza se llena de actividades y mercados.
Visitar la Catedral de Sant Pere: un imponente edificio que mezcla estilos arquitectónicos y cuenta con frescos del reconocido artista Josep Maria Sert.
Degustar la gastronomía local: no puedes irte sin probar la longaniza de Vic, famosa por su calidad y sabor.
Recorrer el casco antiguo: sus calles estrechas están llenas de tiendas y restaurantes que ofrecen una experiencia única.
- Excursiones cercanas: desde el Parque Natural del Montseny hasta el Monasterio de Sant Pere de Casserres, las opciones para explorar la comarca de Osona son variadas y accesibles.