Cleopatra: la última faraona del Antiguo Egipto y su legado olvidado en la ciencia y la medicina
Un vistazo a las contribuciones menos conocidas de una de las figuras más emblemáticas de la historia.
Cleopatra VII, conocida principalmente por su poderosa influencia política y sus relaciones con figuras romanas como Julio César y Marco Antonio, también dejó una huella significativa en campos como la ciencia y la medicina que a menudo queda opacada por su fama en otros ámbitos. Esta última reina del período ptolemaico de Egipto fue no solo una líder astuta, sino también una estudiosa dedicada cuyos intereses y conocimientos abarcaban mucho más allá de los asuntos de estado.
Cleopatra: mucho más que una gobernante
La visión tradicional occidental, fuertemente influenciada por las narrativas romanas, ha retratado a Cleopatra como una seductora y ambiciosa. Sin embargo, en otras tradiciones, especialmente en textos griegos y más tarde en escritos árabes, Cleopatra emerge como una erudita y maestra, versada en medicina, magia y alquimia, y participante en intercambios académicos con otros filósofos.
Una científica y médica adelantada a su tiempo
A lo largo de su reinado, Cleopatra patrocinó avances en ciencia y medicina, y fue responsable de significativas contribuciones al famoso Gran Biblioteca de Alejandría. Se documenta que Cleopatra realizó experimentos en química y toxicología, algunos de los cuales, aunque éticamente cuestionables hoy en día, fueron pioneros para su tiempo.
Por ejemplo, se interesó profundamente en estudiar los efectos de diversos venenos, utilizando condenados a muerte para sus experimentos, buscando la manera menos dolorosa y más rápida de morir, un estudio que irónicamente también informaría su propia muerte, apuntan desde Discover Magazine.
Cleopatra también escribió tratados sobre temas médicos, incluyendo cosméticos y ginecología, demostrando un amplio conocimiento de las preparaciones farmacológicas que incluían desde maquillajes hasta remedios para la calvicie.
Su influencia se extendió a lo largo de los siglos, con referencias a sus obras encontrándose en manuscritos griegos y, posteriormente, en fuentes árabes, donde se la consideraba una gobernante capaz, una científica consumada y una gran constructora, aunque erróneamente se le atribuyó la construcción del Faro de Alejandría, clarifican en la publicación Decoded Past - Decoding the Past.
Este aspecto menos conocido de Cleopatra como científica y médica destaca un legado que merece ser recordado y celebrado, mostrando una faceta de su vida que va más allá de los relatos románticos y políticos que dominan su imagen en la historia popular. Su dedicación a la ciencia y la medicina revela a una líder que no solo manejaba con habilidad los hilos del poder, sino que también buscaba fervientemente el conocimiento y la sabiduría en su afán por mejorar la salud y el bienestar de su pueblo.