Bajar de peso: a qué hora del día tienes que pesarte para obtener un resultado más exacto

Controlar el peso corporal es una práctica común para quienes buscan bajar de peso o mantener una vida saludable. Sin embargo, el momento del día en que te subes a la báscula puede influir significativamente en la precisión de la medición. Conocer la hora óptima para pesarse te ayudará a obtener resultados más exactos y a seguir de manera efectiva tu progreso.

Expertos en salud coinciden en que la mejor hora para pesarse es a primera hora de la mañana, justo después de despertarse y de haber ido al baño, pero antes de ingerir alimentos o líquidos. Este es el momento en que el cuerpo está más cerca de su peso basal, ya que no ha sido influido por la ingesta de alimentos, líquidos o actividad física.

Importancia de la consistencia en las mediciones

Además del momento del día, es fundamental mantener una rutina constante al pesarse. Utilizar la misma báscula, en condiciones similares y con la menor cantidad de ropa posible, garantiza que las mediciones sean comparables a lo largo del tiempo. 

Las fluctuaciones en el peso corporal son normales debido a diversos factores, como la retención de líquidos, la ingesta de alimentos y los niveles de actividad física. Por ello, pesarse en condiciones consistentes ayuda a minimizar estas variaciones y proporciona una visión más clara de las tendencias reales de tu peso.

Es recomendable evitar pesarse después de entrenar, ya que la pérdida de líquidos por el sudor puede dar una impresión errónea de pérdida de peso. Asimismo, las mujeres deben tener en cuenta que durante el ciclo menstrual pueden experimentar retención de líquidos, lo que puede influir en las mediciones.

Frecuencia recomendada para pesarse

La frecuencia con la que te pesas también juega un papel importante en el seguimiento de tu progreso. Algunos estudios sugieren que pesarse diariamente puede ser beneficioso para la pérdida de peso, ya que aumenta la conciencia sobre los hábitos alimenticios y de actividad física. 

Sin embargo, para muchas personas, pesarse una vez por semana es suficiente y puede proporcionar un buen equilibrio entre estar informado y no obsesionarse con las fluctuaciones diarias. Elige un día y una hora específicos de la semana (preferiblemente por la mañana) y cúmplelos.

Es importante recordar que el peso corporal puede variar hasta dos kilos en un solo día debido a factores como la ingesta de alimentos, la hidratación y la actividad física. Por ello, es fundamental no desanimarse por pequeñas fluctuaciones y centrarse en las tendencias a largo plazo.

Consejos adicionales para una medición precisa

• Utiliza una báscula calibrada: asegúrate de que tu báscula esté en buen estado y calibrada correctamente para obtener mediciones precisas.

• Coloca la báscula en una superficie plana: evita superficies irregulares que puedan afectar la lectura del peso.

• Mantén una postura adecuada: párate derecho y en el centro de la báscula, sin moverte, para asegurar una medición exacta.

Siguiendo estos consejos y pesándote en el momento adecuado del día, podrás obtener mediciones más precisas que te ayudarán a monitorear tu progreso en el camino hacia tus objetivos de pérdida de peso. 

Recuerda que el número en la báscula es solo una parte de la ecuación; factores como la composición corporal, la salud general y el bienestar también son esenciales en tu viaje hacia una vida más saludable.