Los aterradores secretos de Nazaret: la oscura y aislada cárcel colombiana
Fue un sitio de encierro para quienes eran considerados una amenaza. Su aislamiento y las extremas condiciones climáticas convirtieron la vida allí en un tormento.
En lo más alto del páramo de Sumapaz, una prisión abandonada esconde secretos inquietantes. A pesar de su historia oculta, quienes la han explorado aseguran que aún guarda rastros de su aterrador pasado.
Construida en los años 50, esta cárcel fue un sitio de encierro para quienes eran considerados una amenaza. Su aislamiento y las extremas condiciones climáticas convirtieron la vida allí en un tormento.
Hoy, solo quedan ruinas que el tiempo y la naturaleza han reclamado. Sin embargo, entre los escombros, aún se cuentan relatos de horror que han sobrevivido al olvido.
Nazaret: la aterradora cárcel secreta de Colombia
En lo alto del páramo de Sumapaz, el más grande del mundo, se encuentran los restos de la cárcel de Nazaret. Esta prisión, construida entre 1953 y 1957, fue utilizada para recluir a opositores políticos y personas consideradas amenazas durante el gobierno del general Gustavo Rojas Pinilla.
Su ubicación en la vereda Chuquisaca, en la localidad de Usme, al sur de Bogotá, la convertía en un sitio aislado y de difícil acceso, como explicó Kevin Bolaños, creador de contenido que ha investigado sobre el lugar. Las condiciones del páramo hacían que la vida en la cárcel fuera extremadamente difícil. Con temperaturas que oscilaban entre -2 y 12 grados Celsius, fuertes vientos y alta humedad, la supervivencia era un reto.
Para qué se usaba la cárcel de Nazaret
En los años 50, la cárcel de Nazaret era prácticamente inaccesible. La carretera Troncal Bolivariana, que hoy facilita el acceso, no existía en ese entonces, por lo que los prisioneros y los materiales de construcción debían ser transportados por caminos improvisados o en helicóptero.
Su construcción se dio en un periodo de alta tensión política en Colombia. Tras derrocar a Laureano Gómez en 1953, Rojas Pinilla prometió estabilidad en medio del conflicto de La Violencia, pero su gobierno estuvo marcado por la represión. La cárcel de Nazaret albergó a opositores del régimen y, según la tradición oral, en su interior se practicaban torturas y otras formas de represión, aunque no existen registros oficiales que lo confirmen.
Cómo es la cárcel de Nazaret en la actualidad
Actualmente, solo quedan ruinas de lo que alguna vez fue esta prisión de alta seguridad. Con el paso de los años, los materiales de construcción han sido saqueados y las paredes muestran un avanzado estado de deterioro.
Además, las estructuras han sido intervenidas por visitantes que han dejado grafitis, modificando el aspecto original del sitio. "Con la ayuda del dron descubrimos otra zona con restos de concreto. Creemos que pudo haber sido un helipuerto desde una parte un poco más alta de la cárcel", señaló Bolaños.